Mientras que desde la entidad financiera señalaron que en el último trimestre del año se verán acentuados factores como los altos costos de producción y una limitada demanda por productos, desde Global AgriTrends, su CEO Brett Stuart, analizó las diversas condiciones macroeconómicas que han sido determinantes en que se reduzcan los márgenes de ganancias para los productores mundiales de carne de cerdo durante el año y lo que queda de él.
El mercado mundial de la carne de cerdo ha presentado este 2022 condiciones desafiantes para la industria y que se estima se mantendrán hasta fines de este año. Según el Informe Q4 2022 de Rabobank del sector porcino, los productores mantendrán la cautela en su actuar debido a las incertidumbres globales y muy especialmente en cuanto a la demanda, donde los consumidores se enfrentan a presiones cada vez mayores, sometidos a una inflación y crisis económica que impacta al mundo.
En el mismo sentido, el destacado analista Brett Stuart, CEO de Global AgriTrends, entregó su visión y análisis acerca de la industria porcina en el marco de una actividad organizada por ChilePork en Japón, instancia durante la cual expuso acerca de la evolución de los precios de diversos productos, presentando importantes alzas en aquellos de uso más universal y en materias primas. Sin embargo, al analizar la evolución de las carnes fue enfático en señalar: “La carne es la rezagada, la carne es la que sube más lentamente y la que menos sube (…) Estamos en un lugar donde todos los costos se han inflado, los cereales. Todos estos aumentos de precios han aumentado y presionan los márgenes, pero los precios de la carne no han seguido el ritmo. Y eso tiene un gran impacto en la oferta”, comentó Stuart.
El analista destacó que si bien la carne de ave y vacuno aumentó en 2021 y 2022, la carne de cerdo en realidad bajó sus precios, siendo determinante la influencia de China en esto. “Casi la mitad de la carne de cerdo del mundo está en China y los precios de la carne de cerdo china se desinflaron desde junio de 2021 hasta 2022. Entonces, el peso de esa gran deflación china pesa sobre los precios mundiales de la carne de cerdo”, comentó. Lo que sin duda ha provocado que se reduzcan los márgenes para los productores de carne de cerdo a nivel mundial.
El tercer informe trimestral 2022 de Rabobank acerca del sector porcino, destaca que la inflación supera el crecimiento de los salarios y se espera que esto tenga un impacto negativo en el consumo de proteínas durante el cuarto trimestre de 2022, así como el primero de 2023.
Se estima que la presión inflacionaria influirá en la demanda por servicios alimentarios, ya que el costo de los alimentos ha aumentado en distintas partes del mundo en relación a los salarios, de esta forma, las personas preferirán destinar su dinero a la compra en canales minoristas, en lugar de salir a restaurantes o pedir comida a domicilio.
Los altos costos de producción son otros de los desafíos que considera Rabobank para la carne de cerdo, ya que este cierre de año está definido por cosechas deficientes en Estados Unidos, Europa y Asia, lo que limita la disponibilidad de granos y oleaginosas para la alimentación de los animales. Brett Stuart, al analizar lo que ocurre en Estados Unidos y otros países relevantes para la industria en esta materia, señala que “el alto costo de los granos y la alta inflación ha provocado que los productores se resistan a la expansión. El pronóstico de producción es -2% para 2022 y un 1% más para el próximo año. Entonces, si observamos la producción porcina global en Europa, China, EE. UU., eso corresponde a ¾ de la producción porcina mundial. La producción porcina ha sido más pequeña este 2022 y probablemente volverá a ser más pequeña en 2023. Ahora, eso generalmente conduce a aumentos de precios con el tiempo”.
Desde Rabobank indicaron que en conjunto, las perspectivas de altos costos operativos y la demanda limitada determinarán que las empresas sean más conservadoras con sus estrategias para aumentar su producción de cerdos en 2023, lo que supone un desafío para el próximo año, pero también para las producciones futuras y para las cuales el CEO de Global AgriTrends tiene algunos pronósticos.
“Aquí hay una perspectiva de 10 años y esto es bastante simplista, pero lo que hice fue trazar de forma dispersa el consumo mundial de carne frente al PIB mundial. Se correlaciona con un R2 de 0,99, cuanto más dinero ganan las personas en el mundo, más carne comen. Ahora, esto se pone interesante porque el FMI y el Banco Mundial pronostican el PIB; entonces, si tomo ese pronóstico del PIB y lo conecto a mi modelo de línea de tendencia, lo que me dice es que 22 billones de dólares más del PIB en los próximos 10 años generarán 68 millones de toneladas más de consumo de carne. Vamos a necesitar 68 millones de toneladas más de carne en todo el mundo en los próximos 10 años; y la pregunta es, ¿podemos llegar allí?”.
“Mi estimación es que la demanda mundial de carne de cerdo aumentará 18 millones de toneladas, por lo que sugiero que en los próximos 10 años podríamos ver un déficit significativo entre lo que se necesite a nivel mundial y lo que se producirá para carne de res, cerdo y aves. Lo que eso significa es esperar precios más altos a medida que avanzamos en la próxima década. Sería difícil encontrar formas de expandir la producción en todo el mundo lo suficientemente rápido como para mantenerse al día con la creciente clase media mundial”, concluyó Stuart.