En el marco de un innovador seminario científico celebrado el pasado 21 de marzo, destacados especialistas se dieron cita para abordar los desafíos y avances en la nutrición porcina desde una perspectiva integral que incluye el bienestar animal. El encuentro, orientado a propiciar un diálogo enriquecedor sobre este importante tema, permitió compartir avances acerca de la calidad de vida de los cerdos y por ende, del desarrollo sostenible en la industria porcina.
El evento, desarrollado en el Campus Colchagua de la Universidad de O’Higgins, contó con la participación de connotados expertos y profesionales del sector, quienes compartieron sus más recientes investigaciones y prácticas en el ámbito de la nutrición porcina, poniendo especial énfasis en un enfoque ético y responsable. Desde ChileCarne asistieron Simón Araya, Jefe de Nutrición Animal; Matías Andrade, Jefe de Proyectos de Innovación y Desarrollo; e Ignacio Marchant, Jefe de Sanidad Porcina, todos quienes pudieron conocer en detalle los progresos presentados.
El seminario fue inaugurado con las exposiciones de académicos del Departamento de Fomento de la Producción Animal de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias de la Universidad de Chile. Entre ellos, el Dr. Sergio Guzmán, quien destacó cómo el aprendizaje prenatal puede influir en la conducta alimentaria de los cerdos, mientras que la Dra. Carolina Valenzuela subrayó la importancia de las nuevas tecnologías en la suplementación de hierro para prevenir deficiencias en los primeros estadios de vida de estos animales.
Además, el Dr. Jaime Figueroa, profesor titular de la Universidad de O’Higgins, compartió sus últimas investigaciones sobre la variedad sensorial en la alimentación porcina, destacando que una dieta diversa en sabores, colores, olores y texturas mejora significativamente los indicadores de bienestar y productividad de los animales. Estos hallazgos abren nuevas perspectivas para la industria, al sugerir que la rotación de sabores puede tener efectos beneficiosos en el consumo y el crecimiento de los cerdos.
Por otro lado, la Dra. Daniela Luna, reconocida académica e investigadora, enfatizó en el impacto positivo de la calidad de la interacción entre humanos y animales en el bienestar y la productividad porcina. Su trabajo resalta cómo una relación armoniosa puede reducir el estrés de los animales, mejorar la composición de su microbiota intestinal y aumentar su resiliencia. Asimismo, advirtió sobre las consecuencias negativas de prácticas inadecuadas en el manejo, las cuales no solo perjudican el bienestar de los cerdos, sino que también afectan la calidad de la carne.
Este seminario releva el compromiso por una industria porcina más ética y sostenible, reafirmando la importancia de continuar explorando y aplicando prácticas que armonicen la producción con el respeto al bienestar animal.