Héctor Echeverría, Agregado Comercial y Agrícola de Chile en México, conversó con ChileCarne y analizó el escenario de exportaciones e importaciones de aves en México luego del brote de COVID-19, explicando cómo ha impactado la crisis sanitaria en la forma de llegar a los consumidores.
¿Cuál es la situación de las importaciones en México actualmente, considerando el contexto COVID-19?
Durante el primer trimestre del 2020, las exportaciones e importaciones la carne de cerdo presentaron un récord histórico. El volumen de importaciones es mayor en 9.4% con 301.8 mil toneladas, el precio de importación ha subido hasta 28.6% lo que conduce a un alza de 40.7%.
Las aves también tuvieron un récord histórico de importaciones en el primer trimestre de 2020. Subieron las exportaciones de pollo, no obstante, el volumen vendido es de solo 624 toneladas.
El volumen de importaciones se incrementó en 10.7% y el precio registró un alza 3.3%, en consecuencia el valor comercial subió 14.4%.
¿Cuál ha sido la evolución de las exportaciones e importaciones? pronósticos que se prevén para las próximas semanas?
El flujo de importaciones no se ha detenido, pero las empresas del sector agroalimentario en México han resentido el impacto de la crisis por el COVID-19. Como ejemplo, tenemos que parte del abastecimiento que era consumido por hoteles, restaurantes, comida rápida, catering y food service ha disminuido, porque las grandes cadenas han dejado de comprar productos frescos y procesados. Esta misma situación afecta al consumo doméstico por lo que se ha generado una sobre oferta de algunos productos, como es el caso de los productos frescos que lamentablemente no pueden ser acomodados en los canales de retail.
La preocupación de fondo se centra en la economía del ciudadano y su capacidad para poder adquirir la llamada “canasta básica”, ahora que muchas personas se encuentran resguardadas en sus hogares y recibiendo el 50% de sus ingresos recurrentes o en algunos casos, desempleados porque fueron despedidos. Considerando que México se encuentra en la fase tres de la pandemia, justo en el pico más intenso de contagios, el escenario no está pronto a cambiar.
¿Cómo sigue el abastecimiento de alimentos en México? ¿Qué medidas gubernamentales y a nivel de las industrias de alimentos se están tomando para evitar la no interrupción del suministro de la cadena productiva de alimentos?
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de México (SADER) ha confirmado varias veces que está asegurada toda la producción agroalimentaria y que registra excedentes en rubros como la carne de cerdo, pollo y huevo, por lo que tratarán de colocar esos excedentes en países socios de Centroamérica.
El Ministerio de Agricultura mexicano ha mantenido estrecho contacto con las Cámaras y Asociaciones que agrupan a los productores y distribuidores de alimentos, con el fin de asegurar la cadena de suministro. Al momento no se han tomado acciones de gran magnitud con el sector privado, ya que el gobierno mexicano está privilegiando la ayuda a los pequeños productores y trabajadores agrícolas a los que se les ha ofrecido créditos pequeños.
Por otro lado, el Consejo Coordinador Empresarial ha presentado una iniciativa al gobierno federal para enfrentar la crisis en el sector alimentario mexicano, en donde también se consideran acciones para fortalecer la cadena de alimentos; por ejemplo, el robustecer la vigilancia en los traslados de la mercadería de los puertos al punto de venta, porque en los últimas semanas se ha registrado un incremento importante de robos durante los trayectos. Al momento esta iniciativa no ha sido aceptada por el Gobierno.
¿Cómo ve el mercado de las carnes en general en México?
El mercado ha sostenido sus niveles de importación-exportación en medio de la pandemia, pero no está cerca de pasar su peor momento. Muchas de las empresas están contrayendo sus recursos financieros para sobrevivir, por lo que es momento de tratar de mantener a los socios y clientes que tenemos en el mercado, que seguramente ya han modificado los volúmenes de los pedidos que hacen a sus proveedores. Por ahora las proyecciones son válidas pero es más importante las acciones tempranas para sostenerse en la crisis. Es momento de pegarle una llamada al cliente en México y preguntar ¿Cómo estás? ¿Cómo enfrentas este momento? ¿Qué podemos hacer para seguir trabajando juntos?
¿Cómo proyecta sobre todo las exportaciones de aves desde Chile a México?
Históricamente, en México se ha tenido un déficit entre la producción y el consumo de carne de pollo de sus casi 130 millones de habitantes. Sus exportaciones de carne de pollo son pocas, dado que éste se caracteriza por ser un país importador.
Sabemos que México es un gran consumidor de carnes blancas, el mercado del pollo fresco es la carne que más se consume, casi un 90% de los consumidores mexicanos así lo dictan, dejando el pequeño porcentaje restante para venta de congelados y otros con algún valor agregado (apanado, marinado, cocido). Es decir, en el caso de Chile que vendemos producto congelado, las preferencias de las personas que lo consumen han dejado poco espacio para probar otras modalidades. Ahora que se han tenido que modificar las preferencias de compra (inclinándose por el e-commerce y la adquisición de productos empacados) puede ser una buena oportunidad de diversificarnos y llegar al consumidor azteca.
[:]
