En un esfuerzo por fortalecer la industria porcina y aprender de las mejores prácticas internacionales, una delegación integrada por productores, proveedores, profesionales y asesores provenientes de Chile y Argentina, visitaron Dinamarca entre el 26 de agosto y el 2 de septiembre, en el marco del programa Elanco Team.
Dinamarca, reconocido como un importante productor y exportador de carne de cerdo a nivel mundial, opera en un espacio territorial restringido. Sin embargo, ha sabido consolidarse como referente gracias a su avanzada tecnología y normativas que armonizan la coexistencia de la industria con las comunidades.
El contraste en la densidad productiva es notable: mientras Chile posee alrededor de 29 cerdos por Km2, Dinamarca alberga casi 300 cerdos por Km2. A pesar de las similitudes en tecnología y sostenibilidad, el ordenamiento territorial danés marca un punto diferencial.
Rodrigo Castañón, Gerente de Negocios y quien fue representando a la Asociación de Exportadores de Carnes de Chile , fue uno de los participantes de esta misión. “Lo más relevante del viaje podría resumirse en dos puntos. Por un lado, conocimos una serie de iniciativas rescatables que se podrían incorporar a la producción nacional. Si bien en Chile hay alrededor de un 70% de producción que usa tecnología avanzada, en Dinamarca hay iniciativas basadas en inteligencia artificial desde la granja a la faena que podríamos replicar. Por otro lado, está el tema de ordenamiento territorial y de cómo Dinamarca, a través de lo normativo, hace posible que la industria pueda seguir existiendo”, comentó.
Un ordenamiento territorial adecuado permite la distribución estratégica de la industria porcina, aprovechando al máximo el espacio disponible y considerando factores geográficos y ambientales que pueden afectar la producción. La correcta ubicación de las granjas evita conflictos con áreas residenciales, zonas de conservación o áreas destinadas a otros usos. En este sentido, un buen ordenamiento considera el impacto ambiental de las granjas, lo que incluye la gestión de residuos, la protección de cursos de agua y la conservación de la biodiversidad. Para que la industria porcina chilena continúe creciendo y sea competitiva a nivel mundial, necesita un plan de desarrollo que considere el largo plazo y donde el ordenamiento territorial es una herramienta clave para asegurar que la expansión se realice de manera sostenible.
La misión a Dinamarca tuvo un enfoque amplio. Más allá de la industria porcina, se buscó que la delegación pudiese conocer innovaciones en diversas áreas. Uno de los puntos álgidos fue la visita al SEGES Innovation pig research center, financiado principalmente por la industria porcina danesa. Allí se dialogó sobre los desafíos actuales y las posibles lecciones para Latinoamérica.
El tema de la prescripción de antibióticos en la Unión Europea, en análisis por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile, fue discutido durante la visita a SEGES y otras instalaciones. Además, se abordaron temáticas relacionadas con sostenibilidad y bienestar animal. “Otro tema importante que se vio en este viaje tiene que ver con la prohibición del uso de zinc con fines terapeúticos en Europa a partir del 2022, que es un tema que ha ido avanzando en su discusión en otros mercados. Nosotros queríamos conocer la experiencia y soluciones que ha empleado Europa, de modo de prepararnos como industria chilena”, comentó Rodrigo Castañón.
En la industria porcina, el óxido de zinc se ha utilizado a niveles terapéuticos en la alimentación de lechones para prevenir la diarrea posdestete, una enfermedad común en cerdos jóvenes tras el destete. Una de las preocupaciones asociadas con el uso de altas dosis de óxidos de zinc es el impacto ambiental. El zinc, cuando es excretado por los animales, puede acumularse en el suelo y, con el tiempo, puede tener efectos nocivos en el medio ambiente, contaminando el suelo y las aguas subterráneas. Dada la preocupación ambiental y, en algunos casos, por la resistencia a los antimicrobianos, la Unión Europea decidió prohibir el uso de óxido de zinc a niveles terapéuticos en la alimentación de cerdos a partir de 2022.
Adicionalmente, la delegación se reunió con proveedores de soluciones tecnológicas aplicables al sector pecuario y exploró innovaciones en empresas de otros rubros, como una que utiliza inteligencia artificial en la inspección sanitaria.
La iniciativa concluyó con un balance positivo. “Desde ChileCarne reconocemos la importancia de este tipo de iniciativas impulsada por Elanco. Estos esfuerzos, que promueven la transferencia tecnológica con líderes mundiales en la producción de carne de cerdo, son esenciales para mantener actualizada a nuestra industria «, expresó Rodrigo Castañón.