El 19 de noviembre se realizó la segunda edición de ChileCarne Talks, con una reunión de alto nivel que congregó a expertos del mundo público y a líderes de empresas y gremios y cuyo objetivo fue dialogar con respecto a un tema crítico: las finanzas sostenibles y su rol en la transición climática.

ChileCarne Talks es un ciclo de charlas técnicas creado por la Asociación de Exportadores de Carnes de Chile, que busca constituirse en un espacio de actualización y discusión de temáticas relevantes como la sostenibilidad, la salud pública y el bienestar animal.

La tarde del 19 de noviembre se llevó a cabo en las oficinas de ChileCarne la segunda mesa redonda de este circuito de conversaciones llamada “Finanzas y Cambio Climático: ¿Qué viene? ¿Cómo nos impacta?”, a la que llegó un selecto grupo de representantes de distintas empresas y gremios. Esta temática es de suma relevancia para el mundo empresarial, y no sólo para el sector productor y exportador de carne de cerdo y aves, sino también para otros sectores del agro, quienes participaron activamente de esta instancia de diálogo.

Durante el evento, la audiencia tuvo el privilegio de escuchar las ponencias de dos expertas en el ámbito de las finanzas sostenibles: María Paz Gutiérrez, Jefa de la Oficina Finanzas Sostenibles del Ministerio de Hacienda, y María José Montero, Directora de la Asociación Chilena de Administradoras de Fondos de Inversión (ACAFI) y Directora de FIS Ameris.

Desde la perspectiva del sector público, se presentaron los avances en materia de sostenibilidad que está llevando el Ministerio de Hacienda, destacando iniciativas clave como la estandarización de las definiciones de lo sostenible, las mediciones del capital natural, y la canalización de flujos financieros internacionales en la materia. Por su parte, desde el sector privado, se abordó la oportunidad y el valor de invertir en proyectos medioambientalmente sostenibles y de impacto, contribuyendo a la resolución de problemáticas ambientales y sociales a nivel local, en las áreas donde operan.

“Si los objetivos ambientales que se comprometen como país son incosteables, no son compromisos válidos. Por lo tanto, el rol de la oficina y porqué se fundó, es para canalizar flujos financieros públicos y privados hacia acciones que permitan llevar a cabo los compromisos ambientales que tenemos impuestos como país, entendiendo cuánto nos cuestan esos compromisos”, indicó María Paz, haciendo referencia al rol que les compete respecto de los compromisos ambientales que se ha autoimpuesto el país.

Además, dio a conocer algunas iniciativas que hoy está impulsando la oficina de “finanzas sostenibles”, entre ellas, un sistema taxonómico de clasificación de actividades económicas, una herramienta “viva” que permitirá homologar, mediante un lenguaje común, cuando una actividad económica se está llevando a cabo de una manera medioambientalmente sostenible y cuándo no.

“Los desafíos de este siglo nos han llevado a incorporar no sólo la noción de riesgo para tomar buenas decisiones en la inversión y administración de activos, sino que también el impacto que genera ya sea positivo o negativo”, expuso María José Montero. La directora de ACAFI compartió su mirada desde el mundo financiero privado sobre lo que buscan las finanzas sostenibles: “tenemos la oportunidad de generar soluciones rentables a los problemas sociales y ambientales con beneficios sostenibles a largo plazo. La inversión sostenible apunta hacia un modelo más integral, donde el bienestar de empleados, comunidades y el planeta también sea prioritario”.

Según la Global Sustainable Investment Alliance, en el mundo existen más de 30 billones de dólares en activos de inversión sostenible que, según María José, están disponibles para todos aquellos proyectos que cumplan con ciertas características: “Hay que dejar claro qué es y qué no es inversión sostenible. En ACAFI hemos desarrollado guías para ayudar a nuestros asociados a incorporar criterios sociales, ambientales y de gobierno corporativo en el desarrollo de sus fondos. Por eso, esclarecimos que los fondos sostenibles son aquellos que cumplan 4 características: intencionalidad explícita; un enfoque sostenible en particular; que se mida y reporte los ámbitos sostenibles, y que exista un claro compromiso de ir mejorando”.

Moderada por Juan Carlos Domínguez, presidente de ChileCarne, la interesante discusión contó con importantes representantes de sectores industriales como Tomás Lyon, Director de MaxAgro, José Manuel Allende, Gerente General de AASA, Ramón Covarrubias, Gerente General de Chorombo, María José Irarrázaval, Directora de ASPROCER, Juan Pablo Matte, Secretario General de la SNA, Guillermo Iturrieta, Gerente General de Exporlac, y, Javier Irarrázaval,  Director de Políticas Públicas de CPC.

Los asistentes a la reunión generaron un debate, intercambiaron opiniones y buenas ideas para el futuro, también sacaron conclusiones compartidas sobre la importancia de trabajar en conjunto entre autoridades, gremios y empresas, para contar con una línea base que valorice los activos naturales y servicios ecosistémicos que generan.

“El objetivo es dar visibilidad a todos los sectores de la industria agroalimentaria y otros sectores económicos de temas relacionados al cambio climático claves, para que las empresas consideren en el desarrollo de su estrategia. Pusimos a disposición este espacio para todos, para dar un panorama general sobre qué cosas debemos empezar a hacer hoy, sí o sí, y qué otras requieren más tiempo y recursos para llevarse a cabo en términos de sostenibilidad”, comentó Daniela Álvarez, Gerente de Sustentabilidad de ChileCarne.

Saber en qué posición está Chile y el avance del sector privado con respecto a estas temáticas, permitirá a las empresas -y al país- trazar metas sostenibles alcanzables, medibles, y contar con estados financieros que integren las externalidades negativas y positivas para maximizar las rentabilidades a futuro.