Se proyecta que el 2022, la industria de las carnes de cerdo y aves exportarán más de 638 mil toneladas vara, alcanzando los US$1.406 millones, lo que equivales a un 88% del total de carnes chilenas exportadas. Rabobank proyectó que en 2023 la industria de las carnes blancas continuará siendo desafiada por los altos costos de producción y cambios en las tendencias de consumo.
Se trata de un escenario general a destacar ya que las contingencias mundiales y nacionales presentaron distintas dificultades para esta industria en 2022, tal como ocurrió para otros diversos sectores: inflación, elevados precios de las materias primas, conflictos políticos, sociales y diversas enfermedades, todos los cuales se constituyeron en retos a superar, y que incidieron directa e indirectamente en los costos de producción, estabilidad y proyecciones. En este sentido, la industria chilena debió ser resiliente, sorteando positivamente las diversas situaciones a pesar de la adversidad.
Analizando en detalle cada proteína producida y exportada, las cifras de Aduanas de Chile de 2022, indican que la industria productora de carne de pavo exportará más de 30 mil ton vara este año, con un aumento de un 25% en volumen en relación al año anterior y de 185% en valor, alcanzando los US$177 millones. Con estos resultados, se puede confirmar que la carne de pavo se posicionará como la tercera proteína animal más exportada de Chile, luego del cerdo y el pollo.
En cuanto al volumen total de carne de pollo local exportada en 2022, llegará a 214 mil ton vara, con un aumento de un 11% en relación a 2021, equivalente a US$ 583 millones; 28% más en valor en comparación al año pasado.
En relación con la carne de cerdo, las exportaciones se han visto reducidas debido principalmente a importantes factores a nivel mundial, los cuales han incidido directa e indirectamente en la proyección de la industria porcina chilena y mundial. Según lo registrado por Aduanas de Chile, la industria productora de esta proteína exportará 393 mil toneladas vara, lo que implica una reducción en volumen de un 12% en relación a 2021, y una participación en valor de más de US$ 646 millones, lo cual significa una reducción de un 20% con respecto a 2021. China, Corea del Sur y Japón siguen siendo los principales mercados de destino de esta proteína chilena, con un 75% de participación en volumen del total exportado.
Estados Unidos, México y China en tanto, fueron los principales destinos de exportación en 2022 para las carnes de pollo y de pavo chilenas, con más de US$ 760 millones totales exportados entre ambas proteínas.
Proyecciones 2023
En Rabobank proyectaron que en 2023 la industria de las carnes blancas a nivel mundial continuará siendo desafiada por los altos costos de producción y cambios en las tendencias de consumo.
“Como industria hemos tenido años sumamente desafiantes y el 2022 no fue la excepción. Debimos concentrarnos en ser más eficientes de modo de consolidar nuestros márgenes de ganancia y a la vez debimos ser más seguros, estableciendo protocolos aún más estrictos, lo que ha sido sin duda nuestra garantía. Mantenemos nuestra mirada positiva al constatar los resultados de exportación para las carnes de pavo en 2022, y estamos ocupándonos para que pronto la carne de cerdo y pollo retorne a mejores cifras exportadoras”, comentó el Presidente de ChileCarne, Juan Carlos Domínguez.
En cuanto a proyecciones más específicas, Rabobank señala que en China el pronóstico apunta a que habrá un crecimiento lento en el procesamiento de cárnicos porcinos, mientras que el de aves gozaría de un incremento, aunque limitado.
En Brasil, la producción de cerdo y pollo irá al alza, impulsada en gran medida por una fuerte presencia en los mercados de exportación; a nivel local, uno de los sectores más beneficiados será el bovino.
Para Norteamérica, la perspectiva es que gracias a una alta demanda, la aportación de cárnicos avícolas aumente, aún frente a la presencia de la Influenza Aviar AH5N1. En el caso del porcino se espera un flujo más estable.
En Europa las previsiones de Rabobank indicaron contracción a lo largo de todas las especies productivas, derivado de la presencia de enfermedades, nuevas regulaciones en su mercado interno y menor volumen de exportaciones.