El análisis en busca de residuos químicos de las carnes es fundamental para asegurar la inocuidad, salud de los consumidores, y cumplir los requisitos nacionales y de exportación. Corroborar que los medicamentos veterinarios son utilizados siguiendo las buenas prácticas y respetando los periodos de carencia a través de análisis de laboratorio, es un componente que demuestra la seriedad de los productores nacionalesyentrega confianza a los mercados del mundo.
¿EN QUÉ CONSISTE?
Este programa consta de un componente oficial y otro de autocontrol, ambos permiten contar con información sobre la concentración, presencia o ausencia de residuos químicos en poblaciones animales y sus carnes, a través de muestreo y análisis en laboratorios autorizados.
¿CUÁL ES EL OBJETIVO?
Controlar que los medicamentos de uso veterinario (antimicrobianos, antiparasitarios y otras sustancias activas) y los pesticidas de uso agrícola (organoclorados, organofosforados, piretroides, entre otros) se usen de acuerdo con la normativa nacional e internacional vigente.
Verificar que, en el caso de productos prohibidos (anabolizantes, cloranfenicol, entre otras), éstos efectivamente no se utilicen.
Garantizar que los productos de origen animal destinados a consumo humano no contengan sustancias químicas más allá de los límites permitidos (dioxinas, furanos y PCB´s, metales pesados, medicamentos de uso veterinario, pesticidas, entre otros).
Implementar acciones correctivas a nivel de planteles, en caso de detección de sustancias químicas más allá de los límites permitidos.
¿QUIÉNES PARTICIPAN?
ChileCarne, Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), laboratorios de análisis, asesores internacionales, productores de aves y cerdos y plantas faenadoras.
¿CÓMO FUNCIONA?
SAG y plantas, calendarizan anualmente las muestras en los diferentes planteles y plantas faenadoras que participan en el programa. Luego se realiza el muestreo y se envían las muestras a laboratorios autorizados, quienes, mediante metodologías analíticas validadas internacionalmente, las analizan y emiten un protocolo de resultado que es gestionado posteriormente para alimentar la evaluación de riesgos en la cadena productiva de las carnes.